A pesar de los avances médicos, persisten mitos y temores alrededor de uno de los tratamientos más eficaces para controlar la diabetes: la insulina. Muchos pacientes aún la asocian con un “fracaso” o con una etapa avanzada de la enfermedad, cuando en realidad puede ser la clave para mantener una vida plena y saludable.
Los sensores electroquímicos no enzimáticos representan una innovación prometedora para el control de la diabetes. Al ofrecer mediciones de glucosa más estables, precisas, continuas y económicas que los métodos tradicionales, pueden facilitar un manejo más efectivo de la enfermedad.